Semana Santa
Cuenca tuvo un “Miércoles Santo” insólito y extraño
Jueves, 09 de Abril de 2020. Cuenca | Rafael Torres/ El Día digital.es
No fue sin lugar a dudas el Miércoles Santo que todos los nazarenos que participan en la procesión del “Silencio” hubieran deseado. No hubo nervios, ni tampoco emociones, ni marchas procesionales, ni capuces blancos y rojos, y por supuesto los olivos de la Oración y del Prendimiento no se mecieron a lo largo del recorrido procesional.
Solamente de forma virtual y obligada por las circunstancias, los nazarenos del Silencio desfilaron y se agarraron al banzo de su paso devocional. Y de forma imaginaria pudieron trasladarse hasta las iglesias de San Esteban, El Salvador, La Catedral y de San Pedro para resucitar otro Miércoles Santo de abril distintos a todos…
Mucha tristeza la vivida ayer en Cuenca por la ausencia de los monumentales pasos procesionales que desfilan en la procesión del Silencio, en un Miércoles Santo que pasará a la historia como aquel en que los nazarenos se quedaron en casa.
Sólo faltan 12 meses de dura espera, 365 días llenos de evocaciones y 8 770 horas de nostalgia pero puedo testificar con total seguridad, que un nazareno con tal de disfrutar del Miércoles Santo, esperaría toda la vida…Comienza la cuenta atrás.
Cuenca volverá a soñar contener de nuevo otro impresionante desfile del "Silencio" y por supuesto volverá la emoción y la ilusión.
Comentarios
Publicar un comentario