Desaparece el antiguo Kiosco de El Vivero
Este final de mes de julio ha traído la desaparición del antiguo quiosco de El Vivero. Todo un símbolo en la ciudad de Cuenca situado junto al Parque de Santa Ana conocido como El Vivero, en plena Avenida de Castilla-La Mancha.
Este emblemático quiosco se encontraba vallado durante más de tres años por parte del Ayuntamiento, para evitar un posible riesgo de desprendimiento, pues el pequeño edificio tenía desperfectos en la cubierta y otras zonas dañadas en su estructura.
Lo cierto es que conforme estaba el quiosco actualmente con un estrafalario y aparatoso vallado que afeaba la zona del parque de Santa Ana y de la Avenida donde estaba situado, se me antoja, que es mejor que lo hayan quitado. Imagino que el Ayuntamiento de la ciudad estará estudiando un destino futuro para el simbólico edificio que durante décadas sirvió a miles de pequeños y grandes con la venta de chucherías, revistas, periódicos, cómics, agua, frutos secos, helados en las tardes calurosas de verano, entre otros productos, y forma parte de la evocación romántica de los conquenses.
Es evidente, que los quioscos en este momento no son una fuente de negocio pues los productos que ofrecen se consiguen por otras vías y quedan en desuso su función principal con la que surgieron. Ahora bien, en el caso del “kiosco del Vivero” se debería restaurar y darle otro uso. Se me ocurre, por ejemplo, como punto de información turística, además de otras utilidades que seguro las tienen.
Solamente hay que pensar que forma parte de la vida de los conquenses y muchas generaciones han crecido comprando chuches en él, luego la prensa y más tarde comprando a sus nietos en el mismo quiosco de “El Vivero”. Haciendo que forme parte de la historia de la ciudad y de los propios conquenses.
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