Semana Santa
La Venerable Hermandad del ECCE-HOMO de San Miguel celebra solemnes cultos
Los actos religiosos se celebrarán a lo largo de este fin de semana en la iglesia de San Pedro
La Venerable Hermandad del Santísimo Ecce-Homo de San Miguel celebra este fin de semana sus solemnes cultos en honor a su imagen titular. Unos actos que comenzarán esta tarde con las solemnes vísperas a las 19:30 horas, seguidamente la Hermandad ofrecerá una invitación a todos los asistentes en las inmediaciones de la iglesia de San Pedro.
Los actos centrales se desarrollarán el domingo, 11 de septiembre, a partir de las 12:15 horas, con el homenaje y entrega de distinciones a seis de los hermanos más antiguos. A continuación comenzará la solemne función religiosa, oficiada por el consiliario de la Hermandad, y con el acompañamiento musical de la Asociación Musical Alfonso Octavas. Al finalizar la misa los Hermanos Mayores ofrecerán una invitación a los asistentes.
Los Cultos finalizan el lunes, 12 de septiembre, con la misa funeral por los hermanos y hermanas difuntos. Acto que comenzará a las 20:15 horas.
Esta Hermandad está fundada en 1860, por un grupo de fieles de la parte alta de la ciudad, que rindieron culto a la imagen de un Ecce-Homo, de gran calidad artística del siglo XVI, en la iglesia de San Miguel. Cuando fue cerrada la iglesia al culto en 1902, los hermanos trasladaron a su Sagrado Titular a la iglesia de San Pedro, perteneciente a la parroquia de Santiago y San Pedro.
Realizó su primer desfile procesional en la Semana Santa de 1905 en la recién creada procesión del Silencio. Durante la Guerra Civil, la Hermandad sufre la pérdida de su antigua imagen, retablo y andas. Se reorganiza la Hermandad en marzo de 1940 y un año después recibe su nueva talla del Ecce-Homo obra del escultor Federico Coullaut-Valera.
Una imagen de las más bellas y sobresalientes que desfilan en la Semana Santa de Cuenca, representando el momento que narra el evangelio de Juan, 18 de Jesús ante Anás.
“La cohorte de soldados, el tribuno y los guardias de los judíos prendieron a Jesús y le ataron. De allí le llevaron primeramente a casa de Anás, porque era suegro de Caifás, que era pontífice aquel año”.
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