OBITUARIO
Recordando a Julián Saiz, que se fue físicamente ayer (Por Rafael Torres)
Martes, 02 de Junio de 2020. OPINIÓN | Rafael Torres/ El Día digital.es
La Parca no descansa nunca. Siempre se encuentra alerta y vigilante para echarte la guadaña y llevarte con ella de este mundo de vivos. Es lo único que todas las personas tenemos seguro que algún día nos visitará la muerte.
Ayer en plena festividad de la Patrona y Alcaldesa de Cuenca se llevó a Julián Saiz una gran persona sin respetar que estaba dándole la comida a su nieto. No tienes perdón. Cómo se te ocurre quitarnos a Julián de esa forma tan cruel. Tú no lo conocías, verdad. Es una injusticia lo que has hecho con Julián.
Julián “Julianín” era un ser con buenos principios, siempre muy ético y con un tono de coherencia absoluta entre fondo y forma de ser. Jamás lo vi nunca enfadarse con nadie. Un caballero dentro y fuera de cualquier sitio donde estuviera. Guardaba las formas siempre. Gran conversador y entrañable conquense. No había semana que no intercambiaríamos varios whatsApp relacionados con las tradiciones y costumbres de esta Cuenca de su alma que tanto amaba.
Conocí a Julián por la unión que sentíamos ambos por la hermandad de nuestra devoción “El Huerto de San Esteban” hace de eso más de treinta años y desde entonces nos tratábamos como familia. Su natural y sincera forma de ser te acercaba a su amistad. Te fuiste en el día de la Virgen de la Luz, dejándonos una luz que resplandecerá en nuestras vidas hasta que volvamos a encontrarnos.
A lo largo del año nos veíamos en nuestros queridos asuntos como era: Semana Santa, San isidro de Abajo, la Feria Taurina (te estoy viendo Julián con la tralla en la mano en el patio de caballos preparando el paseíllo, siempre de punta en blanco). Y qué San Mateos hemos echado, como bien decías tú, que nos quiten lo bailado y sin maldad. Risas y más risas.
Te echaré mucho de menos amigo Julián. Siempre se dice que se ha marchado una gran persona pero en tú caso, era verdad. Dile a Nuestro Padre de la Oración, que vele por nosotros y que te deje asomarte a las barandillas del cielo para poder seguir viviendo con esa ímpetu sincero tus particulares asuntos. Siempre con buena intención. Te aseguro “Julián” que es imposible no estar triste, tú ausencia física duele mucho, pero tus incalculables recuerdos siempre nos harán sonreír.
Adiós Julián. Que duro se hace perder a la gente que quieres. Ayer fue un mal día para muchas personas ante tú irremediable ausencia. Algo se ha muerto también en aquellos amigos que te queríamos. Recibe su alma con amor Señor, abriga su espíritu y dale descanso eterno junto a ti en el Huerto de la vida eterna.
Lo he sentido mucho. Ya no nos veremos en tus, nuestras queridas"turbas". D.E.P
ResponderEliminarJulio