HERMANAMIENTO ENTRE HUERTOS

VENERABLES HERMANDADES DE NUESTRO PADRE JESÚS ORANDO EN EL HUERTO (VULGOS DE SAN ANTÓN Y DE SAN ESTEBAN)

HERMANAMIENTO ENTRE AMBAS

TRESCIENTOS AÑOS SU OLIVA MÁS BLANCA, SEÑOR, TE OFRENDAN.

RETABLO DE TU ORACIÓN, ALTAR VIVO EN PLATA VIEJA.

CADA HOJA UN PELDAÑO LEVE PARA QUE EL ÁNGEL DESCIENDA.

¡DÉJATE LLEVAR POR ELLOS

GENTES DEL JÚCAR Y EL HUÉCAR!

Hace algunos años, en le seno de la Venerable Hermandad de Jesús Orando en el Huerto de San Esteban a través de la propuesta formulada por algunos hermanos de la Junta de Diputación, surgió la idea y la posibilidad de un futuro hermanamiento con la Venerable Hermandad de Nuestro Padre Jesús Orando en el Huerto de San Antón, dado que son las dos únicas hermandades de nuestra Semana Santa que representan la agonía de nuestro señor Jesucristo en el Huerto de los olivos añejos de Getsemaní, allende Siloé y cruzando el Cedrón.

 El huerto de los Olivos estaba separado del de Getsemaní por un camino; tenía libre acceso y estaba cercado sólo por una tapia baja; era más pequeño que el huerto de Getsemaní. El huerto de los Olivos disponía de grutas, terrazas y muchos olivos, y no ofrecía lugares muy a propósito para orar y meditar.

De este enlace se consigue así renovar la fraternidad que siempre ha existido entre dos cofradías gemelas que durante mucho tiempo han compartido los mismos apellidos, al mismo tiempo que es también un sentido homenaje a nuestros mayores, pues son ellos los que han permitido que, con su callada labor, está historia de amistad recíproca haya seguido adelante durante todo este tiempo.

Pero la fundada razón de esta afinidad gravita en los antecedentes históricos que nos llevan a afirmar que el hermanamiento entre las dos hermandades no es un hecho aislado ni una invención de nuevo cuño de sus directivas actuales.

La hermandad de Nuestro Padre Jesús Orando en el Huerto, de San Antón, nació en el seno del antiguo cabildo de la Vera Cruz y Nuestra Señora de la Misericordia, al amparo de la desaparecida ermita de San Roque y del cercano convento de los religiosos franciscanos.

Cuando la ermita quedó definitivamente arruinada, a principios del siglo XIX, las imágenes del cabildo de la Vera Cruz pasaron a ocupar sendos altares en la entonces ermita, hoy parroquia, de Nuestra Señora de la Luz, o de San Antón. Algunas décadas más tarde, sobre el antiguo edificio del convento de franciscanos se instaló la parroquia de San Esteban, trasladada desde el antiguo solar, también en ruinas, que hasta entonces se encontraba junto la convento de religiosas bernardas, y es en esta parroquia en la que, ya en el siglo XX, la imagen de Jesús Orando en el Huerto de, San Esteban, empezó a recibir culto. De esta forma se cierra el círculo temporal y geográfico que entrelaza a ambas cofradías hermanas.

La hermandad de Jesús Orando en el Huerto de San Esteban fue fundada como tal en mil novecientos veintitrés. Sin embargo, ya desde el año mil novecientos ocho, la imagen salía en la procesión del Miércoles Santo, aún sin haber sido fundada como tal la nueva hermandad. Los primeros años, y hasta que Mariano Catalina donara oficialmente a la hermandad del Prendimiento una talla procesional, obra del escultor Mariano Moreno, la imagen titular de la hermandad de Nuestro Padre Jesús Orando en el Huerto, de San Antón, estuvo saliendo tanto el Miércoles Santo como el Jueves Santo, para lo cual se contó con la autorización de la Archicofradía de Paz y Caridad.

 
Además, aunque oficialmente la salida en procesión de la imagen donada por Mariano Catalina corría a cargo de la hermandad del Prendimiento, lo cierto es que muchos hermanos de la cofradía de Nuestro Padre Jesús Orando en el Huerto, de San Antón, también colaboraron para facilitar que ello se pudiera llevar a cabo

Durante la Guerra Civil casi todas las hermandades conquenses de Semana Santa vieron destruidos sus pasos titulares; Por su parte, la talla de Nuestro Padre Jesús Orando en el Huerto, de San Antón, no fue destruida en su totalidad, pues la imagen del ángel, fue escondida durante todo el conflicto bélico en casa de un hermano. La imagen de Jesús, aunque sufrió severos destrozos pudo ser restaurada, volviendo a salir a la calle en la Semana Santa de mil novecientos cuarenta. Prestando otra vez en mil novecientos cuarenta y uno su imagen titular a la hermandad de Jesús Orando en el Huerto, de San Esteban, que en marzo de aquel año había celebrado la primera reunión para lograr su recuperación.

Una vez conocida esta propuesta, se retomó y desarrollo un año más tarde de manera firme en la Junta General Ordinaria del día nueve de Mayo de dos mil cinco aprobándose de forma unánime por todos los presentes el hermanamiento con la Venerable Hermandad de Nuestro Padre Jesús Orando en el Huerto de San Antón. Por su parte la homónima de San Antón lo hizo en la Junta General también de forma general por toda la asamblea presente.

Determinándose por parte de ambas hermandades iniciar los pasos y gestiones oportunas que hubieran de conducir a una primer acercamiento formal que se desarrollo el día veinticinco de Junio de dos mil cinco, Natividad de San Juan Bautista, donde como nota anedoctica una vez comenzada la reunión entre ambas directivas se puso a llover de forma intensa haciéndose presente la advocación de nuestro titular “En el Huerto “y la necesidad de agua bendita que requieren nuestros campos; en la reunión se presento un borrador para el futuro hermanamiento, donde quedo recogido el fin del mismo, actos culturales y religiosos previstos; el hermanamiento contara con un acto común el día veintiséis de febrero en la iglesia de San Esteban consistente en una Función Religiosa común con la presencia de los dos pasos en el altar conformen desfilan por las calles de Cuenca, la misa será consagrada por los consiliarios de ambas cofradías y contara con actuación musical para mayor realce de la misma.

Al amparo de este hermanamiento como quiera que el fin primordial y razón de ser de la cofradías de nuestra Semana Santa y especialmente y en cumplimiento de la naturaleza asistencial de nuestras hermandades se pondrá especial interés en la realización de actividades de carácter asistencial por eso han resuelto canalizar una ayuda social a través de la O. N. G. “Viviré” vinculada al conquense Nuncio Apostólico en la República de Gongo y Gabón. D. Andrés Carrascosa Coso.

Así mismo los presentes manifestaron que a fin de que se plasme el hermanamiento en un símbolo que perdure, las cofradías hermanas se intercambiaron un estandarte en dicha Celebración Religiosa, para conmemorar esta relación cordial, este se ubicara en un lugar de honor en el desfile procesional de cada cofradía e irán acompañados por dos hermanos, ha sido confeccionado por las “Bordadoras en Oro” San Julián y diseñado por el hermano Antonio Abarca.

El hermanamiento se ratificara en las Funciones Religiosas de ambas cofradías concretamente el primer domingo de cuaresma en la del huerto de san Esteban y el cuarto domingo de cuaresma en la del huerto de san Antón donde las juntas de Diputación certificaran en un acta de protocolo, dándose a conocer a sus Juntas Generales.

Este año de trabajo ha servido para hacer lazos de amistad entre nazarenos/as con un denominador común el amor por nuestra Semana Santa, en esta historia protagonizada por “Jesús” hace ahora dos mil seis años.

Ha sido un trabajo complejo, hacia nuestras hermandades, no un amor triunfalista, ni exagerado, sino un amor natural de quien siente sus propias raíces.

Rafael Torres.

Publicado en la Revista 'Cuenca Nazarena' en el año 2006.