La lluvia no impidió la celebración de la Virgen de la Piedad
Cuenca | Rafael Torres/El Dia digital.es
La Ínclita y Venerable Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno de Tarancón celebró el pasado 10 de noviembre la festividad de la Virgen de la Piedad. Si bien, la solemne procesión prevista por la calles del municipio conquense, tuvo que ser suspendida por la incesante lluvia que no dejaba de caer durante toda la tarde, está se realizó dentro de la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción.
Fue una tarde muy emotiva para la Hermandad del Nazareno, que comenzó con la presentación del paso nuevo de la “Entrada de Jesús en Jerusalén”, obra del escultor Manuel Madroñal Isorna, qué estuvo representando por sus padres Manuel y Antonia por no poder desplazarse el autor hasta Tarancón por enfermedad. Este paso está previsto que desfile en la próxima Semana Santa del año 2019.
Los hermanos presentes en el acto conocieron a través de los bocetos presentados como será el paso al completo y pudieron ver la cabeza a tamaño natural de la imagen de Jesús, que obtuvo una respuesta muy gustosa por parte de los mismos.
Seguidamente se homenajeó al alcalde de Tarancón José Manuel López Carrizo, y a la diputada nacional María Jesús Bonilla, así como a los concejales presentes, imponiéndoles la medalla de la Hermandad y obsequiándoles con el cuadro del diploma del 300 Aniversario de la constitución de la cofradía.
Después del reconocimiento a las autoridades locales, se realizó la procesión con la imagen de la Virgen de la Piedad, dentro del templo. El paso fue portado por 40 banceros entre hombres y mujeres que desfilaron de forma muy conmovedora al son de las marchas procesionales interpretadas por los 50 componentes de la Banda de Cornetas y Tambores pertenecientes a la Hermandad del Nazareno, con una iglesia iluminada solamente por la luz de las velas.
Concluido el cortejo en honor a la Virgen, la directiva de la Hermandad nombró nuevo capataz a Javier Martínez Santaolla. El acto religioso continúo con la celebración de la santa misa oficiada por el párroco Miguel Alberto, con un recuerdo especial para los difuntos de la Hermandad. Al finalizar se procedió al besamanos por parte de los hermanos, fieles y devotos.
La jornada en honor a la Virgen de la Piedad, concluyó con una cena de hermandad donde estuvieron presentes más de 150 hermanos en un conocido restaurante local.
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